¿Donde está el santo grial en el TRADING?

La búsqueda del santo grial podría ser el título de una película de Indiana Jones, pero no es así. Todo aquel trader que empieza suele pasar horas y horas devorando información en busca de la estrategia perfecta, aquella que nunca falla, la que le permitirá mantener un 100% de aciertos de forma indefinida en el tiempo.

Así nos podemos pasar meses e incluso años aprendiendo sobre todo lo que esté relacionado con los mercados (indicadores, amplitud de mercados, Elliot, volumen) y será totalmente inútil. Ese santo grial nunca lo vamos a encontrar de esta manera. Nadie lo ha hecho y nadie lo hará jamás.

Como comentábamos la semana pasada en el artículo de la estructura de la Onda de Elliot, el verdadero santo grial no hay que buscarlo en ninguna estrategia, por que, sencillamente, no existe esa estrategia que nos de el 100% de operaciones ganadoras.

Podremos encontrarnos  con  ratios de aciertos de más del 90%. Hace poco publicamos una estrategia nuestra que se acerca a esa cifra, pero son estrategias con una esperanza matemática limitada (aunque positiva) y ratios Beneficio/Riesgo muy pobres. Son las típicas de ir a buscar 5 pips arriesgando 25.

Las respuestas las debemos encontrar en el sistema y el error de muchos está en confundir sistema con estrategia. El sistema es mucho más que unas simples reglas de cómo entrar y como salir, el sistema engloba todo el conjunto de detalles y reglas que marcan nuestra forma de ver y enfrentarnos al mercado. Cuanto más completo sea nuestro sistema y mayor el grado de compromiso que tengamos con él, más cerca estaremos de encontrar el eslabón perdido. Esta debe ser nuestra responsabilidad como traders.

De ahí  nace la idea de que el verdadero Santo Grial se encuentra en el documento que todo operador debe tener a modo de manual de instrucciones y que recoge de principio a fin cada paso que debemos dar en nuestros análisis y operativas. Hablo del PLAN DE TRADING.

Es cierto que muchos operadores ven el trading como un pasatiempo, un juego de azar o una apuesta deportiva, una forma de ganar dinero de forma simple (igual de simple es ganarlo que perderlo). Ciertamente, este artículo no está pensado para ese grupo.

Personalmente veo el trading como un negocio, mi negocio. Habiendo pasado ya por varias empresas (ajenas y propias), la herramienta que siempre he tenido bajo el brazo ha sido el manual de operaciones, aquel que me ha indicado desde como asar un chuletón de Ávila hasta como realizar el servicio de postventa tras cerrar la venta de una propiedad. Las empresas serias todas tienen (o deberían) un manual de instrucciones en el que se explica como se deben hacer las cosas en cada momento.

 

El trading plan es nuestro manual de instrucciones y el mejor aliado frente al mercado, nos debe dar respuesta de que hacer en cada situación. Nos dice cuando y como debemos operar, y también nos avisa de cuando entrar y cuando salir, qué cantidad debemos operar y cuando debemos auditar.

A grandes rasgos, nuestro trading plan debe incluir la siguiente información:

-Cual será nuestro horario de trabajo.

-Cual será el universo de activos que vamos a operar.

-Cual será el estilo operativo que vamos a seguir: scalping, daytrading, swing…

– Cual o cuales serán nuestra/s estrategias operativas.

-Cual y como estará configurado nuestro espacio de trabajo.

-Cual será nuestra política de entrada y salida del mercado.

-Cual será nuestra estrategia de Money management.

-Cuales serán nuestros objetivos.

-De que forma realizaremos un seguimiento de nuestras operaciones.

-Como y cuando realizaremos una auditoria del sistema.

-Cuando y como podemos implementar mejoras o cambios en el sistema (performing).

Lógicamente, todos estos puntos deben ser desarrollados con todo lujo de detalles hasta el punto de no dejarnos nada en el tintero, por insignificante que nos pueda parecer.

No se trata de que nuestro trading plan sea una enciclopedia de 200 páginas, se trata de trasladar a un espacio reducido todo aquello que tiene que ver con nuestro negocio, de forma que ante cualquier coyuntura del mercado tengamos muy claramente definido como debemos actuar.

Si en un momento determinado estamos en el mercado y surgen dudas, nuestro plan de trading debe ser capaz de resolverlas, y si no es así, es que está incompleto, debemos mejorarlo.

Como ves la estrategia es solo una pieza dentro de este puzzle. Lógicamente pieza importantísima, durante nuestra formación debemos centrarnos en buscar y encontrar una estrategia en la que nos sintamos cómodos y que, por supuesto, tenga una esperanza matemática positiva. A ser posible que gane más veces de las que pierda, y que cuando gane, gane más de lo que pierda cuando las cosas no salen bien.

Por supuesto, este manual no servirá de nada si no ponemos desde nuestra parte un compromiso total e incondicional de seguirlo a rajatabla, contra viento y marea. Si psicológicamente no estamos preparados para acatar sus instrucciones al pie de la letra, debemos ser conscientes de que formaremos parte de ese 90% de operadores que “dan de comer” al mercado.

¿Santo grial? Trading Plan y compromiso, aplícalo y comenzarás a ver este negocio de otra manera.